sábado 27 septiembre 2025 - 22:43
Los sionistas se han vuelto más arrogantes gracias al apoyo de Estados Unidos

Hawzah/ Sayyed Abdul Malik Badr al Din, líder del movimiento Ansarolá de Yemen, afirmó que el enemigo israelí sigue cometiendo crímenes que son evidentes para todo el mundo. Los sionistas se han vuelto más insolentes al amparo del respaldo de Estados Unidos.

Según informó la agencia de noticias Hawzah, en su discurso semanal Sayyed Abdul Malik Badr al Din señaló que el enemigo israelí lleva casi dos años consecutivos con su agresión salvaje y genocida contra el pueblo palestino en Gaza. Añadió que, junto con la continuación de la ofensiva, Israel ha intensificado sus ataques sobre la ciudad de Gaza, imponiendo hambre, asedio y sed, lo que ha multiplicado el sufrimiento de la población.

Arrogancia de los sionistas apoyados por Estados Unidos

El líder de Ansarolá afirmó que Israel persiste en crímenes que han quedado al descubierto ante el mundo y que han generado condena internacional. Sin embargo, “se ha vuelto más insolente porque se apoya en la complicidad de Estados Unidos”. Cuanto más protestan los países del mundo y más vergüenza sienten al presenciar semejantes atrocidades, más pasos da Washington en respaldo del enemigo. Recordó que esta misma semana Estados Unidos vetó en el Consejo de Seguridad un proyecto de resolución que pedía un alto el fuego y el levantamiento del bloqueo sobre Gaza. En este marco de apoyo, una delegación de 250 congresistas estadounidenses viajó a Israel en un despliegue de solidaridad con sus crímenes.

El objetivo de Israel es la ocupación total de Cisjordania

Sayyed Abdul Malik destacó que, con motivo del Año Nuevo hebreo, Israel intensificó sus incursiones en la Mezquita de Al Aqsa y la presión sobre los habitantes de Jerusalén. Añadió que el régimen continúa con su política de anexión y agresión en Cisjordania, concentrándose especialmente en la ciudad de Hebrón para asegurar un control total sobre ella, por ser la segunda ciudad más sagrada de Palestina. “Israel busca ocupar de manera integral Cisjordania; aunque de facto ejerce dominio, pretende consolidar una ocupación plena”, dijo.

Operaciones de los combatientes en Gaza, símbolo de resistencia basada en fe y valentía

El líder yemení elogió la lucha de los combatientes en la Franja de Gaza, quienes con recursos muy limitados siguen realizando operaciones heroicas contra el enemigo. Señaló que las Brigadas Al Qassam, las Brigadas Al Quds y otros grupos de resistencia han ejecutado diversas acciones, desde ataques de francotiradores y emboscadas, hasta explosiones de cuarteles y colocación de minas contra vehículos y tropas israelíes.

Afirmó que Israel intenta minimizar el impacto de estas operaciones llamándolas “accidentes”, pero que esta semana las Brigadas Al Qassam llevaron a cabo una ofensiva sorpresiva contra posiciones y vehículos enemigos en los alrededores de Sheikh Radwan. Tanto las Brigadas Al Qassam como las Brigadas Al Quds también lanzaron cohetes de fabricación propia contra bases militares en el sur y oeste de Gaza. “Estas acciones son un símbolo de resistencia de fe y coraje, y muestran la firmeza inquebrantable de los combatientes en Gaza”, expresó.

La yihad en Gaza es una prueba para toda la Umma

Sayyed Abdul Malik sostuvo que los actos de resistencia en Gaza representan una prueba contundente para la Umma y para los regímenes que los traicionaron aliándose con Israel. Mientras algunos gobiernos piden el desarme de los combatientes, Estados Unidos sigue enviando cargamentos ilimitados de armas letales a Israel. “Los regímenes árabes cómplices, en lugar de asumir sus responsabilidades humanas, religiosas y morales, insisten en exigir el desarme de los luchadores palestinos”, criticó.

Siria y el proyecto estadounidense en la región

El líder de Ansarolá señaló que Israel continúa violando la soberanía de Siria, mientras que ciertos grupos gobernantes en Damasco afirman buscar la paz. “Estos grupos no consideran a Israel como enemigo y buscan acuerdos y coordinación de seguridad con él, queriendo ser parte del proyecto estadounidense en la región, lo cual no beneficiará a Siria en el futuro”, aseguró. Explicó que incluso si se firman acuerdos de seguridad, Israel los usará como excusa para legitimar nuevas agresiones. Añadió que el enemigo busca aplicar su plan denominado “Corredor de David”, que contempla incluir a Siria en el mapa sionista hasta alcanzar el río Éufrates, en coordinación con Estados Unidos.

Migración inversa de sionistas y deserción en el ejército israelí

Sayyed Abdul Malik afirmó que el propio Israel reconoce una migración inversa sin precedentes, reflejo de la resistencia palestina y de la firmeza del pueblo. Esta migración significa la huida de colonos sionistas y el crecimiento de la desesperanza en sus filas. “El enemigo admite que muchos oficiales buscan un retiro anticipado y que la escasez de personal alcanza a 12 mil soldados. La deserción se ha convertido en un fenómeno común, consecuencia directa de la resistencia y el sacrificio en Gaza”, señaló.

Declaraciones de Tom Barrack revelan la realidad regional

El líder de Ansarolá destacó la importancia de las declaraciones de Tom Barrack, enviado de Estados Unidos a Siria y Líbano, que reflejan claramente la política oficial de Washington. Barrack aseguró que Israel ocupa un lugar especial en el corazón de Estados Unidos, y que ningún régimen árabe podrá estar a su altura, aunque sirva los intereses norteamericanos. “Para Estados Unidos, los países árabes no son más que vacas lecheras, mientras que Israel tiene carta blanca para agredirlos”, citó Sayyed Abdul Malik.

El enviado estadounidense afirmó también que la paz con Israel es ilusoria, “un espejismo que los árabes persiguen en vano”, y dejó claro que el conflicto no se reduce a fronteras, sino a dominación: una parte busca imponer su poder y la otra debe rendirse.

Sayyed Abdul Malik advirtió: “Quien acepte esa ecuación lo pierde todo: humanidad, dignidad, libertad, religión, identidad y hasta su vida en este mundo y en el más allá”. Criticó duramente la tibia reacción de los gobiernos árabes, en particular Siria y Líbano, frente a tales declaraciones, y denunció la actitud complaciente de algunos que llegan incluso a justificar ataques israelíes, como el ocurrido en Catar.

Concluyó señalando que las palabras del enviado estadounidense sobre Palestina y la ridiculización de la solución de los dos Estados deberían haber provocado fuertes respuestas árabes, pero en cambio muestran la aceptación de una ecuación de sumisión y humillación.

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